De piojos mutantes a mandatos de reyes europeos

Justo el día de ayer estaba leyendo una nota en el periódico que alertaba de la presencia de “piojos mutantes” y no se refería a una generación de X-Piojos que eran perseguidos por sus similares normales. La nota habla sobre la mutación de estos insectos que los han hecho resistentes a los tratamientos tradicionales.

La nota del periódico Excelsiór Más de 20 estados en EU presentan “superpiojos”  menciona:

El investigador y profesor de biología Kyong Sup Yoon analizó por primera vez muestras de piojos de 30 estados y sólo en cinco de ellos no halló rastro de piojos con alta resistencia a los piretroides.

Los piretroides son las sustancias químicas más habituales en los shampoos y cremas que pueden comprarse en cualquier farmacia o comercio sin receta médica para acabar con los molestos piojos en la cabeza, comunes entre los niños.

Y ustedes dirán que porque les hablo de este tema, pues porque desató una serie de recuerdos de mi infancia. Al igual que muchos niños también tuve piojos, aunque al parecer los míos eran de los normalitos.

En esos días lo más común era rapar al infante y varios de mis compañeros lucían orgullosos sus cráneos pelones, los piojos no era motivo de pena, al menos no para nosotros (a lo mejor para nuestras madres si), era algo que podía pasar, como las paperas o un brote de sarampión,  lo que si no recuerdo es que hubiera infestaciones tan serias como las que se ven ahora en las escuelas y al parecer la resistencia a los shampoos especializados es lo que esta complicando su erradicación.

A la botica

La botica de los pobres
Al fondo detrás de un árbol esta la botica de los pobres, de Jerez Zacatecas.

Recuerdo que entonces no se iba al doctor, mi abuelita iba con Rosita su boticaria de confianza a la farmacia que esta abajo de los portales Inguanzo  (véase El comercio e industria en Jerez en los años cuarenta). Cuando entro a estos lugares el aroma característico a alcohol y alcanfor inundan mi mente de recuerdos, sobre todo de aquellas jeringas reutilizables, esas si que daban miedo.

Una vez mencionó en una de sus conversaciones a la pomada (o ungüento) del soldado como remedio eficaz contra los piojos, pero no creo que lo usara alguna vez con nosotros.

A mi me pegaron los piojos en una peluquería después de un corte de pelo, justo llegando a la casa vieron que mi fauna capilar hacía una fiesta en mi cabeza 🙂

Mi abuelita me sentó en una sillita en el patio y empezó a revisarme,  cuando encontró uno lo puso en su uña para tronarlo al tiempo que recitaba este verso:

El Rey de Cataluña mandó decir que te subiera en esta uña,
Y que te diera un tris y un tras,
Si al tris no te morías, al tras te morirás.

Sobra decir que estaba más que contento, cada piojito encontrado era eliminado por sentencia de un rey 🙂

4 comentarios en “De piojos mutantes a mandatos de reyes europeos”

  1. ¡Ay que risa y que ternura! Yo no me sabía esa canción…
    Sí yo también sufrí de piojos, en dos ocasiones que recuerdo:
    La primera tenía tres o cuatro años, estaba en casa de mi padre biológico, muy desaseada y descuidada, de ahí mi mamá y mi abuelo me raptaron, pero esa es otra historia.
    Y la segunda, ya en la primaria en el rancho, ahí me contagié de una compañerita con la que jugaba, prácticamente todo el rancho tenía piojos, pero a mí me perseguían a la salida de la escuela los compañeros para gritarme “la piojosa” la niña chipil” y aventarme piedras… y bueno…
    ahora los piojos mutantes súper ninjas factor X los sufren mis hijas, ahora entiendo porque por más shampoo, vinagre y pastillas no terminan de acabarse estos parásitos 🙁

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    • Quien iba a pensar que desarrollarían resistencia !!! ahora el shampoo les hace lo que el aire a Juarez.

      Quise buscar la composición de la pomada del soldado para ver cual era su ingrediente activo, pero al parecer no era un producto de marca como por ejemplo la pomada de la campana o el vick vaporub (que son productos muy antiguos), más bien era una receta que se elaboraba en las boticas y así se pedía en el mostrador.

      Y eso de cantarle una canción a cada piojito que te encuentres, aunque es divertido, no es práctico 😛

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  2. Muy buena tu historia! Uhhh parece que entro en una minoría de niñas fresa que nunca tuvo los dichosos piojos, es más no recuerdo a nadie de mi colegio que los tuviera, ignoro si alguna vez se presento ese problema en el plantel estudiantil. En el cole de mi hijo el año pasado y ante pasado sí hubo yo nunca me hubiera imaginado enfrentarme a esa plaga, supe que los traían unas niñas (por eso del pelo largo) pero dicen que a los niños es más difícil que se les pegue por el pelo corto, y dicho y hecho, a la fecha no ha sufrido por piojos, esperemos que así se mantenga.

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